Tanto si quieres más sombra del sol, como si buscas más espacio para vivir o un lugar más fresco, los toldos proyectantes pueden ofrecer muchas ventajas a tu casa y a tu espacio exterior. Pero, ¡eso no es todo! Adicionalmente, cuentan con sensores de lluvia y viento.
Aunque la mayoría de los toldos están diseñados para soportar cierto grado de viento, su tamaño, el uso y el modelo pueden afectar significativamente a su rendimiento frente a las brisas más fuertes. Y en Hunter Douglas entendemos la importancia de fabricar un producto duradero que cumpla el objetivo previsto de mejorar tu experiencia al aire libre.
En efecto, los sensores de viento para toldos retráctiles te dan esa tranquilidad de que si estás fuera de casa y se desata una tormenta de viento inesperada, tu toldo se retraerá automáticamente. Esto es importante, ya que evitará posibles daños. A continuación, te mostramos todo lo que necesitas saber de este mecanismo.
¿Qué es el sensor de viento?
Los sensores son sinónimo de eficacia. De hecho, están conectados al motor del toldo retráctil, enviando una señal RTS para extender o cerrar el toldo en función de las condiciones meteorológicas cambiantes. Esta automatización instantánea tiene dos ventajas claras:
– Mayor comodidad: Los sensores permiten que los diferentes tipos de toldos para patios respondan de forma natural y controlen el exceso de luz solar y maximice la refrigeración progresivamente.
– Mayor protección y duración: Algunos fenómenos meteorológicos pueden dañar un toldo retráctil. Pero, gracias a los sensores pueden reaccionar inmediatamente para protegerlo de fenómenos meteorológicos perjudiciales como la lluvia y el viento.
La mayoría de los sensores están relacionados con fenómenos exteriores: sol, lluvia, viento y movimiento. Por ello, los diferentes tipos de toldos en ARIDESIGN responden de forma adaptativa a las condiciones exteriores e interiores que dan como resultado un control bioclimático.