Todos merecemos una buena noche de sueño. Para conseguirlo necesitamos el ambiente ideal: una habitación con luz sutil, sin ruido, un colchón cómodo y, por supuesto, unas sábanas que acaricien y den cobijo. Sigue estos consejos y elige las sábanas adecuadas para tu descanso.
1. Escoge el material adecuado para cada época del año
Un error común que cometemos es usar el mismo material de sábanas para todo el año. Recuerda que puedes encontrar de algodón, lino, seda, franela, nylon o poliéster, cada una con diferentes texturas y frescura. Selecciona la ideal para cada época.
Puedes usar lino o algodón para primavera verano y otoño, al ser telas frescas y que regulan la temperatura. El algodón egipcio se puede usar a lo largo de todas las temporadas.
Para el invierno es buena opción la franela. Puedes poner una sábana de cajón de este material y el resto de las cobijas de algodón más fresco o viceversa.
2. Toma en cuenta las sensaciones
Tus sábanas deben tener un tacto suave mientras duermes. El tipo de tejido es clave para obtener esa sensación placentera. La forma en la que se entrecruzan los hilos a lo largo y ancho del telar influye en la suavidad, apariencia y durabilidad de las sábanas. Existen varias formas de tejido, entre las que destacan el percal, de acabado mate, y el satén, con una vista más brillosa, las cuales se realizan principalmente con algodón.
También es importante que tu ropa de cama sea de calidad para evitar las temidas “bolitas” en su superficie, pues eso causará un efecto desagradable.
3. Opta por un buen diseño
La decoración textil es muy importante para darle personalidad a tu dormitorio. Una habitación con una cama que luzca sábanas con el diseño y los colores que te gusten te hará sentir más cómoda.
Te recomendamos evitar estampados estridentes y usar colores claros para generar la sensación de paz y frescura que te ayudarán a recargar energías.
Sigue estos tips y comprueba cómo tu descanso mejora para enfrentar las actividades del día con una mejor actitud.